La Orden de las Escuelas Pías participa de manera específica en la misión evangelizadora de toda la Iglesia, por medio de la educación integral de niños y jóvenes.

San José de Calasanz, en 1597, descubrió un modo de servir a Dios, dedicando su vida, tiempo, conocimiento y amor a la educación de los niños; fue así como en 1617 se aprobó la Congregación Paulina de los Pobres de la Madre de Dios de las Escuelas Pías, que después, en 1622, sería elevada a Orden Religiosa.

Más de 400 años después este carisma fundacional sigue estando en nuestro día a día, y es el que compartimos con la Iglesia y con la sociedad.

En la Provincia Nazaret vivimos nuestro ministerio en las siguientes obras: